El tiempo pasa, las personas cambian... van y vienen como el sin vivir de las olas. Y soles y lunas pasan, pasan una y otra vez sin cesar. Las estaciones vuelan, otra vez primavera, otra vez el cantar de los pajaros, las flores por las laderas, adorable tiempo. Y el corazón cura, sana, llora hasta reventar de felicidad, lo hace sin pensarlo ni siquiera un segundo, aunque los años pasen, sonrío, y vuelvo a sonreír gracias a ti, sigo siendo la niña más feliz del mundo, por mis ganas de gritar, bailar, cantar y volar, volar lo más alto posible, hasta que los rascacielos parezcan hormigas, indiferentes hormigas. Quiero que todo esto lo hagas conmigo,  el cambio que has pegado en mi vida, por las ganas que tengo de comerme el mundo y todas ellas son debidas a ti. Ya no veo las cosas de la misma forma, ya no pienso en que no pudo ser ni en las veces que me ha tocado levantarme, pienso en vivir este hoy, porque puede que mañana cuando quiera, sea demasiado tarde.